Cultura

Los quintos, una bienvenida a los 18

Salorino celebra una de sus fiestas más importantes y divertidas

Antiguamente, la fiesta de Los Quintos era el preámbulo de la mili, y, por tanto, una fiesta de hombres. Tras la publicación del llamamiento al servicio militar hasta que llegaba el día de la partida, los chicos seleccionados protagonizaban varios días festivos en cada localidad. Hoy, sin una prestación obligatoria en Defensa, Los Quintos se siguen celebrando en Salorino para conmemorar que una generación alcanza la mayoría de edad.

Salorino es una de las pocas localidades que aún conserva la tradición festiva de Los Quintos. Lo hace con aires nuevos y frescos, dejando atrás el rito masculino y la estructura que reproduce divisiones sociales y sanciona el orden heterosexista de género, y centrando toda la celebración alrededor de los 18 años. En los chicos y chicas que cumplen la mayoría de edad ese año.

Se celebra el domingo de carnaval, cuando aún no todos han soplado las velas. Los Quintos se reúnen para recorrer las calles de Salorino y, casa por casa, pedir alimentos para después organizar una comida para todos los vecinos. Ésta es la costumbre, que se mantiene gracias a la ayuda de las familias de los jóvenes, que sufragan gran parte de este almuerzo como balón de oxígeno para que esta fiesta no desaparezca.

Los Quintos de 2018 junto al alcalde, Álvaro Sánchez Cotrina.

Antiguamente, se corrían cintas a caballo. También, se sacrificaban gallos, que después cocinaban y tomaban con vino. Muchas tradiciones, y recuerdos, envuelven a una fiesta que ha evolucionado pero sin dejar atrás la mejor costumbre, la ilusión de unos quintos por compartir con todo un pueblo su bienvenida a los 18.