Turismo

Un hotel para sentir el paisaje de Sierra de Gata

A los pies del Castillo de Trevejo y sobre las ruinas de un viejo lagar se erige un hotel boutique que pretende atraer la visita del viajero norteamericano

Existe un dicho que defiende a capa y espada que las vacaciones ideales de cualquier ser humano que pise la faz de la Tierra transcurrirían en una isla desierta. Una declaración respaldada en el placer de permanecer incomunicado y solitario, lejos de tecnología y aglomeraciones propias de entornos masificados. Es el turismo slow, como le llaman, una de las mejores ofertas que presenta Extremadura y que próximamente tomará forma en el Hotel Boutique Aqua et Oleum, un alojamiento de lujo para sentir el paisaje de Sierra de Gata que hace realidad un sueño norteamericano.

Imagen actual del entorno donde se construirá el hotel boutique. Foto: RAYANOS MAGAZINE.

Joseph Henry Shortell es un amante de Extremadura. Y de Portugal. Natural de Dallas, pisó por primera vez tierra de conquistadores con solo veinte años, “cuando vine a pasar un verano en una finca de Badajoz llamada La Encomienda”. Estudiaba en La Sorbonne de París y lo hizo para participar en la campaña de recolecta de manzanas. Quedó prendido del territorio. “Fue muy duro pero muy gratificante. La gente que conocí era gente preciosa con la que me sentí muy cómodo”, añade en un escabroso castellano salpicado de acento americano. Un mes que no dio más de sí que para conocer los aledaños de Villanueva de la Serena, una excusa perfecta para volver y hacerlo en un período breve de tiempo. “Al año siguiente, cuando vine por un semestre a estudiar a Salamanca. Tenía una novia en Sevilla y así recorrí la Vía de la Plata descubriendo Extremadura”, añade. El brillo se apodera de su mirada celeste, y la conversación evoluciona  un tono chistoso. “A veces en autobús, a veces en tren y otras haciendo autoestop:  como era estudiante no tenía mucho dinero”.

Una experiencia que se adormiló en su interior, emergiendo hace cinco años cuando volvió a transitar por Extremadura en un viaje en coche de Madrid a Lisboa. Paró en Trujillo. “Acababa de llover y el arco iris había salido junto al castillo. En ese momento me llegaron tantos recuerdos del tiempo que había pasado en Extremadura… Que decidí comprar e invertir aquí para regresar”. Este fue el germen del Hotel Boutique Aqua et Oleum: un nostálgico recuerdo que pretende convertir la Sierra de Gata en retiro espiritual de norteamericanos adinerados. “Para mí esto es una aventura, un sueño que se hace realidad y que pienso difundir. No quiero vivirlo solo, quiero que beneficie a la zona y que atraiga a gente de Estados Unidos”, anota. “Y que ellos, como yo, aprendan lo que es Extremadura. Para mí, una joya”.

El arquitecto del proyecto muestra los planos al presidente de la Junta de Extremadura. Foto: RAYANOS MAGAZINE. Detalles de los planos. Foto: RAYANOS MAGAZINE.

La Raya, un bonus

Este hotel boutique tomará forma en las ruinas de un antiguo lagar ubicado a los pies del Castillo de Trevejo, en el término municipal de Villamiel. Sus planos adelantan que el edificio del molino se convierta en una lujosa zona común respetando las construcciones marcadas por la historia, mientras que los antiguos depósitos que custodiaban las aceitunas se reconstruirán como 16 cabañas para alojamientos. Por otra parte también se adecuará todo el recinto, incluyendo las construcciones aledañas como el entorno de un arroyo y los restos de unos cortijos, para servicios ajenos, como jardines, terrazas, albercas, instalaciones y almacenes. El diseño correrá de su parte, y es que Shortell es diseñador de interiores de profesión. “Estamos preparando uno o dos papelitos para empezar. No entiendo todos los detalles pero están esperando la última cosa para empezar las obras”, continúa el gerente, que prevé que las obras puedan alargarse unos 12 meses y abrir las puertas en mayo de 2020.

“Que Portugal esté tan cerca es un bonus - beneficio - increíble”, asevera. Confiesa ser un enamorado del país vecino, que a pesar de localizarse a solo 15 kilómetros de distancia, considera “un mundo diferente”. “Es un bonus muy grande porque en media hora puedes visitar pueblos portugueses con un carácter muy diferente al de esta zona española”. Una pasión que pretende transmitir a los húespedes que lleguen hasta el Aqua et Oleum, el hotel que sentirá el paisaje de Sierra de Gata.

Detalles del interior del viejo lagar. Foto: RAYANOS MAGAZINE. Instante de la visita de Fernández Vara a las obras. Foto: RAYANOS MAGAZINE.

Noticias Relacionadas