Inicio / Turismo / La piscina natural de Portagem, un mirador fluvial
Por Esmeralda Torres
29 June 2019
No hay mirador más curioso que el de la piscina natural de Portagem. Esta pintoresca población rural de la freguesía de São Salvador da Aramenha, perteneciente al término municipal de Marvão, ofrece un agradable paraje en el que disfrutar de la naturaleza durante todo el año. Aunque si alguna estación presume de ser temporada alta es el verano, cuando el paso del río Sever se aprovecha como piscina natural y mirador fluvial.
Justo a los pies de la escarpada que corona el castillo de Marvão y a unos ocho kilómetros de la frontera portuguesa que separa Galegos de La Fontañera, se encuentra un oasis contra el calor que tradicionalmente azota al Parque Natural Tajo Internacional durante julio y agosto. Lo protagoniza el Sever, que, entre dos puentes, regala una zona acuática bastante concurrida por los lugareños. El agua, dicen, es clara, y su temperatura poco tiene que ver con las heladas que caracterizan a las gargantas del norte de Cáceres, haciendo del baño una experiencia ideal y exclusiva, y es que en pocas ocasiones pueden contemplarse tales vistas mientras se disfruta de un chapuzón. Porque sí, si algo caracteriza esta piscina natural es poder deleitarse con una panorámica de la muralla medieval que rodea Marvão.
Otra de las peculiaridades de la piscina de Portagem es su puente medieval. Según cuenta la leyenda, este asentamiento recibió el nombre de Portagem (peaje, en español) después de que los judíos expulsados de España tuvieran que pasar - y pagar - por allí. Un testimonio que calla su puente fortificado, conocido popularmente como Puente Romano o Puente Viejo, que también fue paso obligado para mercaderes y viajeros.
Deliciosa gastronomía alentejana
La piscina natural de Portagem dispone de duchas, césped y una amplia arboleda que garantiza la sombra. También, de aparcamientos muy cerca del paraje, por lo que el viajero no tendrá problemas para volver al coche a buscar algún olvido.
Si el bañista prefiere ir a cuestas con la nevera, tiene a su disposición numerosas mesas, pero los lugareños y forasteros prefieren su chiringuito, un restaurante de gastronomía alentejana tradicional y precios asequibles. Una sopa de verduras junto a un bacalao son las sugerencias engatusan de su carta, donde no faltan los postres portugueses que tanto engatusan a los españoles. Casi tanto, como la piscina natural de Portagem.