Inicio / Escapadas / Barrancos, el pueblo hermano portugués
Por Esmeralda Torres
19 July 2019
La conexión de los pueblos rayanos hace que, a pesar de localizarse en un país, su cultura conecte más con la del territorio vecino. Y, quizá, el mejor ejemplo de ello sea Barrancos, un municipio luso que históricamente ha estado muy vinculado a España: solo nueve kilómetros le separan del primer pueblo español mientras que más de veinte lo hacen de la localidad portuguesa más cercana. Una proximidad que se manifiesta en el hermanamiento con algunos municipios de la provincia de Badajoz y - especialmente - en el uso del barranqueño, un dialecto particular del portugués que mucho tiene que ver con el español.
10:00 Un castillo en las entrañas de Noudar
Barrancos se encuentra en pleno pulmón de un entorno natural. Se trata de Noudar, un ambiente protegido en el que las actividades agrícolas y forestales se desarrollan con un profundo respeto por el ecosistema. A unos 12 kilómetros del municipio y muy cerca del punto en el que se unen Extremadura, Andalucía y Portugal se enclava el cerro en el que confluyen los ríos Ardila y Murtiga, en un entorno donde la riqueza de la vegetación hace del lugar un hábitat natural para venados y jabalís, y atrae a diversas especies de aves como el buitre negro, la cigüeña negra, la grulla y el alzacola. El viajero encontrará la posibilidad de explorar diversos senderos a través de caminos señalizados y adaptados a todas las edades y gustos, aunque el punto fuerte del entorno es el castillo y sus impresionantes vistas. Esta fortaleza de origen islámico fue conquistada por los reyes portugueses, desempeñando un papel bastante importante en la custodia del territorio. Uno de los periodos más reseñables es cuando sirvió de refugio a los cientos de españoles que huyeron de la Guerra Civil española.
13:00 Un molino paradisiaco
De vuelta al municipio encontrará un lugar bucólico y paradisíaco bastante frecuentado por los lugareños en verano con la excusa de darse un chapuzón. Es el Moinho da Pipa, un lugar idóneo para conectar con la naturaleza que abraza Barrancos.
14:30 A Esquina, fuera de carta
Uno de los restaurantes más frecuentados por los lugareños, que lo definen como “siempre un acierto”, es A Esquina (). Son especialistas en diferentes platos de bacalao, el alimento que van buscando el 99% de los viajeros que ponen sus pies en Barrancos, pero si deliciosos están éstos, aún mejor saben las propuestas que se encuentran fuera de carta. Pruebe la carne y deje hueco para el postre sin preocuparse por el precio. La relación cantidad - calidad - precio es inmejorable.
16:30 Un viaje al Paleolítico
La arqueología es un arte muy mimado en Barrancos, y prueba de ello es el Museo Municipal de Arqueología y Etnografía. Constituido por tres salas, la principal se encuentra destinada a la arqueología y en ella se exhiben piezas y objetos desde el Paleolítico al siglo XVIII, mientras que en una secundaria se representa el antiguo consultorio médico municipal de finales del siglo XIX, con una exposición de mobiliario e instrumentos de las más variadas áreas de la medicina. Si curiosidad despiertan sus piezas, más (si cabe) lo hace su localización en una antigua casa señorial del siglo XIX.