Inicio / Turismo / De Fregenal de la Sierra a la Vía Láctea
Por Esmeralda Torres
07 August 2019
Para disfrutar del firmamento no hace falta más que una buena tumbona. Al menos en Fregenal de la Sierra, donde el cielo presume de la calidad y ausencia de contaminación atmosférica. Y del más sobresaliente balcón a las Perseidas, la lluvia de estrellas que cada verano atrae a cientos de curiosos hasta el paraje del Santuario de la Virgen de los Remedios para contemplar las lágrimas de San Lorenzo.
El incesante interés de José Luis y Cristina por la Vía Láctea ha impregnado a toda una comunidad. “Hace cinco años, por nuestras ganas de compartir nuestra pasión con el pueblo de Fregenal y con la comarca, ideamos el Día Internacional del Sol”, relata Cristina Fabo, copropietaria de Entre Encinas y Estrellas (e-EyE). Habla de la actividad con la que el municipio rayano da la bienvenida a la estación estival. “El domingo antes del Solsticio de Verano instalamos varios telescopios en la Plaza de la Constitución”, una actividad que querían complementar “con algo más que aprovechara la noche de las Perseidas”. Así se celebró una primera edición en la que se invitaba a vislumbrar la lluvia de estrellas más popular, y a la que asistieron unas 40 personas. Una cita que ha ido sumando entregas hasta llegar a la quinta, que tendrá lugar el 12 de agosto a partir de las 23:00 horas, y que espera congregar a más de 600 personas. “Para esta edición se colocarán tres telescopios para evitar lo que sucedió el año pasado, que llevamos uno muy inocente y las colas para ver los anillos de Saturno eran bestiales”, explica Fabo.
En cada uno de ellos habrá un astrónomo que analice el firmamento y sus curiosidades, entre las que hará hincapié en la observación de las populares lluvias de estrellas. “Cada vez son más los que saben que en realidad no estamos viendo estrellas, que estamos viendo polvo que dejó un cometa”, aclara la gerente. Se refiere al cometa Swift-Tuttle y su expulsión de gas y partículas de arena al acercarse al Sol, una estela de fragmentos de polvo que cada año, entre finales de julio y principios de agosto, atraviesa el movimiento de traslación de la Tierra provocando que estos diminutos granos se desintegren y quemen al penetrar en la atmósfera. El motivo de esta combustión son sus 200.000 km/h de vertiginosa velocidad con la que entran en el ambiente terrestre. Es ello lo que produce espectaculares trazos luminosos en el cielo nocturno llamados ‘meteoros’ o (popularmente) estrellas fugaces “porque es lo más parecido a una estrella que va cayendo”.
La actividad, que cuenta con la colaboración del Ayuntamiento de Fregenal de la Sierra como una apuesta por el astroturismo como motor de la economía local, pretende hacer las delicias de todos los públicos del territorio, desde las provincias limítrofes hasta otras más alejadas. “Nos ha escrito un señor de Barcelona demandando información”, destaca Fabo. Y es que, de un lado u otro, a todos “se nos ha olvidado lo que es ir al campo a disfrutar de una noche de estrellas”.